Me sabes a viento fresco. Me sabes a sol. A estrellas. A luna. A piel morena. Me sabes a pasado. A presente. A futuro. Me sabes a chocolate. A hierba mojada. A espuma de mar. Me sabes a todo. A nada.
sábado, 5 de septiembre de 2009
miércoles, 2 de septiembre de 2009
jueves, 13 de agosto de 2009
De Ciencia - Ficción.
Os presento a un nuevo personaje de ciencia - ficción. Se hace llamar Mr. Neoclásico, aunque también le gusta el nombre de Mr. Moon, por aquella canción que decía 'I’ve never been so sure I’ve never doubted you, Mr Moon'. Queda claro el porqué del segundo nombre, pero, ¿y el primero? Fácil. Vive en la época neoclásica. Y, sobre todo, está loco por su arquitectura.
Tiene sentido que no le guste leer novelas, si no enciclopedias. Porque, ¿sabéis que? Un de los factores que propulsaron la arquitectura neoclásica fue el llamado enciclopedismo, el cual defendía que la infelicidad del hombre se debía a su ignorancia.
Dicho personaje está desprovisto de adornos, característica también de la ya nombrada arquitectura neoclásica (que se oponía a la excesiva ornamentación del barroco o rococó), ya que muestra sus gustos y su forma de ser sin importarle demasiado lo que los demás piensen.
Como en la neoclásica, busca la perfección en las cosas que hace, porque no le vale, por ejemplo, darte las gracias sólo en un idioma. No. Te las tiene que dar también en francés, inglés, ruso, portugués... y, por si no te parecen suficientes y no te sientes aún agradecida, te las da también en chino y en japonés.
Aunque éste personaje de ciencia - ficción sale poco de su cómic por miedo al resto de la gente, a veces me visita y me pide que le hable de lo que pasa en el mundo en su ausencia. Yo le digo que no se preocupe, que entre otra vez en su cómic, que aquí fuera sigue habiendo la misma gentuza de siempre.
Una última cosa que ni él mismo sabe. Dibuja muy bien.
Tiene sentido que no le guste leer novelas, si no enciclopedias. Porque, ¿sabéis que? Un de los factores que propulsaron la arquitectura neoclásica fue el llamado enciclopedismo, el cual defendía que la infelicidad del hombre se debía a su ignorancia.
Dicho personaje está desprovisto de adornos, característica también de la ya nombrada arquitectura neoclásica (que se oponía a la excesiva ornamentación del barroco o rococó), ya que muestra sus gustos y su forma de ser sin importarle demasiado lo que los demás piensen.
Como en la neoclásica, busca la perfección en las cosas que hace, porque no le vale, por ejemplo, darte las gracias sólo en un idioma. No. Te las tiene que dar también en francés, inglés, ruso, portugués... y, por si no te parecen suficientes y no te sientes aún agradecida, te las da también en chino y en japonés.
Aunque éste personaje de ciencia - ficción sale poco de su cómic por miedo al resto de la gente, a veces me visita y me pide que le hable de lo que pasa en el mundo en su ausencia. Yo le digo que no se preocupe, que entre otra vez en su cómic, que aquí fuera sigue habiendo la misma gentuza de siempre.
Una última cosa que ni él mismo sabe. Dibuja muy bien.
miércoles, 12 de agosto de 2009
Examen final.
'Tranquila, Carlota' Pienso para mis adentros. La verdad, no sé porqué estoy tan nerviosa. Si sólo subo a por unos papeles. Me indica el camino y avanzamos juntos hacia su habitación. 408. Entramos. Cojo los papeles veloz, me despido cortésmente y empiezo a caminar hacia la puerta. Antes de abrirla, me vuelvo para un último adiós. No me da tiempo, ya lo tengo encima, besándome.
Que guapa es. Y tiene estilo. Creo que debo hacerlo ahora, o si no, ocultar mi deseo para siempre. Sólo debo esperar el momento adecuado. Le entrego los papeles. Se aleja. Es ahora o nunca. La beso. Me separo para ver su reacción, y que grata sorpresa ver como me devuelve el beso. Acepta.
No me lo puedo creer, lo estoy besando. Y he sido yo la que ha querido. La verdad, no está mal. No voy a ocultar que ya llevaba tiempo atraída por él, pero no pensé que llegáramos a tanto. Mientras pienso esto, mi vestido desaparece.
Me baja los pantalones, y lo que sigue. Le gusto de verdad, lo puedo ver en su cara. Nunca pensé que esto pudiera pasar. Ella y yo, en mi habitación. Y además, tan... unidos.
Cómo me gusta. No lo puedo ocultar, y él se da cuenta. Se ve que tiene experiencia en ésto. Disfruto como nunca he disfrutado antes haciendo el amor, pero, como toda buena cosa, tiene su final. Nos vestimos en silencio, mirándonos, sonriéndonos. Él tal vez piense 'Que chica tan dulce, que guapa, lo tiene todo.' Yo, mientras, pienso 'Por favor, que no se pase con el examen de la semana que viene. Todavía no he empezado a estudiar.'
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